27 junio 2009

VOLVIÓ UNA NOCHE (tango)

Debo confesar (no sin cierta cuota de culpabilidad) que tenía abandonado el blog, a la pobre Sopaipilla. No me sentía atraído hacia este compromiso adquirido. No quería venir a visitarla “por compromiso” “sólo por cumplir”… estaba seguro que ella se daría cuenta y me pediría que me fuera, amablemente la primera vez y luego me sacaría cagando con cajas destempladas.
Así dejé pasar la oportunidad de hacer aportes en fechas importantes de decesos, de cumpleaños y otros avatares que suelen servir de pretexto para que uno diga con su mejor cara de yo no fui: “vi luz y subí…”. Dejé pasar una pelota que me dejó picando mi amiga M.B. cuando me recriminó “yo me quedo afuera de tu blog”. Estaba hecho el gol; podría haber quedado como los dioses, yo que presumo de rechazar el machismo e intentar enrolarme en las filas opositoras a ese movimiento. En fin.
La cosa es que escuchando algo de música de los Opus Cuatro, vuelven a ponérseme tiritones los oídos escuchando al Marcelo Balsell cantando “CÁLIZ”.
Y recordé la historia de ese tipo genial, Chico Buarque, que supo esquivar la censura opresora de su Brasil natal que se originó en 1964, cuando escribió sobre esa situación haciendo fintas (¿saben?, no encuentro un sinónimo que me satisfaga de esa palabra: censura…) utilizando analogías crípticas, juegos de palabras, alegorías fantásticas.
Por ejemplo en la canción que motivó este aporte: Calíz, donde juega con las palabras portuguesas para “cállese” y “cáliz” (que tal parece, se pronuncian igual, diría que son homónimos –que alguien me corrija, por favor– pero me gustaría más acertar diciendo que son homófonos) en fin, la cosa es que como el cáliz como elemento eclesiástico es intocable, él pensó que podía durar un poco más (pobre…!). Aunque en realidad Chico se refiere a la tercera acepción del término: conjunto de amarguras, aflicciones o trabajos. Inclusive la obra arranca con una cita del evangelio (…)y, arrodillado, oraba diciendo: "Padre, si quieres, aparta de mí ese cáliz.(…) (San Lucas 22, 39-46) y sigue con la apariencia de un relato bíblico con un coro que va repitiendo esa palabra de marras que tiene dos significados: “¡Cállese..!” y “Cáliz” en una clara alusión al sufrimiento de Jesús en el Huerto de los Olivos. Disfruten la maravillosa versión subtitulada.

En uno de los blog que consulté, una dama nos ofrecía esta explicación aclaratoria:
perdonen mi español ...pero me gustaria comentar un detalle que no sé si se puede percibir en otro idioma:
...tragar a dor, engolir a LABUTA,
mesmo calada a boca resta o peito
silencio na cidade não se ESCUTA,
de que me vale ser filho da santa
melhor seria ser filho da "OUTRA"
...en el momento en que la dictadura era la "santa", Chico dice que prefiere ser hijo de la PUTA sea, la democracia. es lo que se percibe por la rima

Y yo les les ofrezco una traducción que encontré “navegando” por esos sitios generosos llamados –casualmente– blog
(…)tragar el dolor, engullir la bronca...
Aún callada la boca, resta el pecho.
Silencio en la ciudad ya no se escucha.
De que me vale ser hijo de una santa,
mejor sería ser hijo de otra,
otra realidad menos muerta,
tanta mentira, tanta fuerza bruta.

Pero el golpe de gracia lo da el final del video. En efecto, el tema no fue censurado, pero cuando estaba presentándolo, le fue cortado el audio. Véanlo de nuevo y terminen de comprender qué es lo que sucede.
Para terminar, aquí va la letra original en portugués con la traducción literal al español
Cálice de Chico Buarque & Gilberto Gil con un profundo agradecimiento a Hugo Carrasco, de cuyo blog CANCIONES Y MENSAJES (http://cancionesymensajes.bolgspot.com/) ha sido tomada prestada. Gracias Hugo.
Pai! Afasta de mim esse cálice
De vinho tinto de sangue...(2x)

Como beber Dessa bebida amarga
Tragar a dor engolir a labuta
Mesmo calada a boca resta o peito
Silêncio na cidade não se escuta
De que me vale ser filho da santa
Melhor seria ser filho da outra
Outra realidade menos morta
Tanta mentira tanta força bruta...

Pai! Afasta de mim esse cálice
De vinho tinto de sangue...

Como é difícil acordar calado
Se na calada da noite eu me dano
Quero lançar um grito desumano
Que é uma maneira de ser escutado
Esse silêncio todo me atordoa
Atordoado eu permaneço atento
Na arquibancada prá a qualquer momento
Ver emergir o monstro da lagoa...

Pai! Afasta de mim esse cálice
De vinho tinto de sangue...

De muito gorda a porca já não anda (Cálice!)
De muito usada a faca já não corta
Como é difícil Pai, abrir a porta (Cálice!)
Essa palavra presa na garganta
Esse pileque homérico no mundo
De que adianta ter boa vontade
Mesmo calado o peito resta a cuca
Dos bêbados do centro da cidade...

Pai! Afasta de mim esse cálice
De vinho tinto de sangue...

Talvez o mundo não seja pequeno (Cálice!)
Nem seja a vida um fato consumado (Cálice!)
Quero inventar o meu próprio pecado (Cálice!)
Quero morrer do meu próprio veneno (Pai! Cálice!)
Quero perder de vez tua cabeça (Cálice!)
Minha cabeça perder teu juízo (Cálice!)
Quero cheirar fumaça de óleo diesel (Cálice!)
Me embriagar até que alguém me esqueça

Padre!Aparta de mi ese Cáliz
Padre, aparta de mí ese cáliz...
Padre, aparta de mí ese cáliz...
Padre, aparta de mí ese cáliz...
De vino tinto de sangre.

Como beber de esa bebida amarga,
tragar el dolor, engullir la bronca...
Aún callada la boca, resta el pecho.
Silencio en la ciudad ya no se escucha.
De que me vale ser hijo de una santa,
mejor sería ser hijo de otra,
otra realidad menos muerta,
tanta mentira, tanta fuerza bruta.

Padre, aparta de mí ese cáliz
de vino tinto de sangre...

Es tan difícil despertar callado,
si en lo callado de la noche me lastimo.
Quiero lanzar un grito infrahumano,
que es una manera de ser escuchado...
Todo este silencio me atolondra,
atolondrado permanezco atento
en el palco, para en cualquier momento
ver emergir el monstruo de la laguna.

Padre, aparta de mí ese cáliz
de vino tinto de sangre...

De tan gorda la puerca ya no anda.
De tan usado el cuchillo ya no corta
Es tan difícil, padre, abrir la puerta
de esa palabra presa en la garganta,
ese trago homérico en el mundo.
De qué vale tener buena voluntad
si callado el pecho, resta la cabeza
de los ebrios en el centro de la ciudad.

Padre, aparta de mí ese cáliz
de vino tinto de sangre...

Tal vez el mundo no sea pequeño, (Cáliz = ¡cállese...!)
ni sea la vida un hecho consumado... (Cáliz = cállese..!)
Quiero inventar mi propio pecado. (Pai - Cáliz=Cállese...!)
Quiero morir de mi propio veneno. (Cáliz = Cállese)
Quiero perder de una vez tu cabeza (Cáliz = Cállese..!)
y con mi cabeza perder tu juicio. (Cáliz = Cállese..!)
Quiero oler humo de óleo diesel (Cáliz = Cállese..!)
y embriagarme hasta que alguien me olvide.

09 abril 2009

NUESTROS ASADOS

"Aunque tú me has has echao en el abandono…De fondo suena la canción que han grabado hace poco un gitano de 35 y un cubano cincuenta años ma­yor. En este rincón uno prepara un trago y un poco más allá el funcionamiento desprolijo de la defensa de River deja lugar para cuestiones importantes como la dudosa existencia del amor, o más pedestres como las supuestas infidelida­des de una señora que, de todos modos, insiste con dejar afuera de sus prefe­rencias a todos los presentes.
aunque tu, te has llevado mis ilusiones…” sigue el gitano, mientras en la parri­lla se apagan las brasas, escenario vacío de una obra de arte que el afecto ac­tiva de tanto en tanto. Sobre la mesa, redonda y cálida, se amontonan los res­tos de las ensaladas, muestras artesanales de lo que ahora llaman “cocina me­diterránea” frente a la insolente y abundante presencia del ajo y el olivo, pero que en realidad tal vez esconden un inconfesado temor a loa vampiros por parte de los contertulios. La damajuana vacía no habla, pero cualquier aprendiz de detective que se asomare, comprendería rápidamente las dificultades am­bulatorias de los comensales en el camino de vuelta.
Ahora, en cada casa donde la hay, una mujer compartirá el lecho y tolerará con amor y resignación los efluvios de esa noche, que –por fortuna para ella- será corta.
Con el amanecer que ya se avecina, viene también para él el momento de res­ponder al: ¿Cómo te fue…? de rigor. Entonces habrá que explicar –con poca esperanza de ser comprendido– que sólo fue un asado, que no jugamos al truco, ni al billar ni a nada. Que tal vez comimos y tomamos algo de más, pero sólo eso; por que no hay nada que explique que nos gusta estar juntos alrede­dor de la mesa.
Descontando la debilidad del argumento ante el pragmatismo de las mentes femeninas y algunas encasilladas masculinas, tal vez podrá recurrirse al poeta Armando Tejada Gómez en su “Milonga de los Asados”
: la amistad celebra misa / en el ritual del asado.” Y, obviamente inspirado en poema, uno de los cronistas, lo dijo a su modo: “… en el altar del asado / hacen su misa los amigos”.
Lee Chon Le & Alberto Carlos Bustos
Pido perdón por lo colorido del aporte. Es que no quiero recordar a mi compadre, a quien extraño y eso ha motivado justamente ésto, con algo oscuro. Me refiero a mi compadre Chito que hace ya muchos días, (un numero cercamo a mil), que dejo de afeitarse.
Lo recuerdo con una música: después sigo y explico todo:

Este tema nos gustaba. Por favor escuchen la letra y la excelente metáfora sobre lo que es un hombre cabal... esos que tienen alma de gúin. Gracias

08 abril 2009

La pampa enlutada

"Póngase detrás de su canto, nunca se luzca usted"; "apague tarde su lámpara, nunca se acuestes hasta que no haya alimentado tu espíritu de palabras que la nutran y de paz que la acune". Tal el consejo de Don Atahualpa Yupanqui le daba a esta alondra pampeana que se nos fue esta mañana.Alguna vez habrá cantado:

Tú que puedes, vuélvete
me dijo el río llorando
los cerros que tanto quieres -me dijo-
allá te están esperando."


Pero no creo que alguien que, por fuerza, debe haber estado en paz con la vida (desde su nombre) haya sentido algo parecido a la tristeza al encararse con la última huella a recorrer. Valientemente y sin quejarse, puesto que, (siguiendo con don Ata), alguna vez, siendo ella muy niña, le dijo: "usted ha elegido un camino áspero y solitario, asúmalo y no se queje".
Si señores, estoy hablando de Suma Paz que se fue esta mañana a cantar sus huellas y milongas a otro cielo; al que van los que han sido coherentes con su destino. En este caso, el de ella fue cantar:



"No ha de faltar jamás quien encuentre una copla, y la mire, la aprenda, la lea, la goce, la llore y la haga suya, y la devuelva a todos, al aire: La golondrina sin pasaporte", dijo Yupanqui.

30 marzo 2009

¿SEREMOS SOLIDARIOS?

Esto copio y del blog EL ANTIGAL
Necesitamos de los Blogers amigos
En una de las tantas hazañas criollas, le robaron el violín a Pablo Agri, que para peor, es el heroico violín de su padre, Antonio Agri.
(Nada más para agregar)Detalles: el hecho se produjo en la Estación Esso de Rolón y Panamericana
El estuche tiene forma de empanada (poco común).El Violín tiene en el fondo 4 letras marcadas a fuego fácil de identificar y tiene dos arcos.
Quien pueda obtener algún dato, puede hacerlo llegar inmediatamente al Chat del blog o a la dirección:
jagperiodismo@gmail.com
Inmediatamente les daremos la pauta como comunicarse con Pablo.
DEBEMOS RECUPERAR ESTE VIOLÍN.Será una forma de decir gracias al genial artista que se nos fue y homenajear a quién con talento lo utiliza hoy.

P/D: Pedimos se coloque esta información y pedido en cada blog, para cerrar la posibilidad que el instrumento sea reducido por los vivillos de siempre.

*EL QUE COMPRA COSAS ROBADAS, TAMBIÉN ES UN DELINCUENTE Y LADRÓN.
LA SEGURIDAD LA HACEMOS ENTRE TODOS. SI NOS CALLAMOS, TAMBIÉN SOMOS CÓMPLICES... DESPUÉS NO NOS QUEJEMOS SI NO HACEMOS NADA, COMENCEMOS POR CASA.

14 marzo 2009

ESTO ES COMO PARA COMPARTIR

Por que sí.. escuchando un poco de música, descubro esta versión de un grupo que se llama EL CUARTO ELEMENTO de una zamba de Leguizxamón y Castilla (cuándo no..!) que se llama Zamba De Argamonte.
Yo había escuchado hace mucho (pero mucho eh..?) una versión e Los Andariegos que nunca más...
ahora descubro ésta y tengo la posibilidad de compartirla.´Ahí va. Por que si nomás.
De nada.. buenas tardes. alfio

P.D.: Qué maravilla el youtube, no? Gracias. Y pensar que hay gente que no se por qué me dice "odiar" este sitio. Alla ellos. )a.,)

04 marzo 2009

Un aporte de Martín Rostand

Me cuenta Martín que dice Maitena:

Una mujer alterada no es una loca. Suponiendo que a las mujeres también nos consideren personas. Una mujer alterada es una persona que está cambiando.
Y creo que fue Borges quien dijo que los únicos que nunca cambian son los tontos y los muertos.
Si bien es cierto que una cosa es sufrir un cambio y otra muy distinta es hacérselo sufrir a otros, convengamos que uno cambia cuando no soporta más lo que le pasa, por mucho que les pese a los que no puedan soportarlo.
Así, la que hasta ayer te esperaba despierta, te cambia la cerradura; la que te esperaba dormida, se compra portaligas; la que veía siete telenovelas, se anota en siete cursos; la que manejaba una empresa, se quiere ir a vivir en carpa; la que cuidaba a la suegra como a una madre, la interna en un geriá¬trico; la flaca se pone hecha una vaca y la gorda baja veinte kilos.
En el medio, te van tratando de 'pirada', insatisfecha, ciclotímica, inmadura, egoísta y por supuesto, del peor de los insultos: feminista.
Pero no todo es negro: muchos de nuestros cambios son recibidos con gran alegría por aquellos que nos rodean, como nuestro nuevo marido o nuestro viejo analista.
Y no fue fácil para nosotras las mujeres descubrir que teníamos derecho a cambiar. Por largo tiempo pensamos que lo mejor hubiera sido ser otra.
Hoy, que sabemos que hasta la más superada se come las uñas, estamos más contentas con nosotras mismas. Cambiando lo que no nos gusta y no sólo los pañales o el rouge. Y lo logramos. En estos últimos años las mujeres cambiamos mucho. Antes, sólo estábamos obsesionadas por conseguir un marido.
Ahora además, estamos estresadas por exigirnos logros profesionales, trastornadas por la culpa que nos provoca la maternidad y desesperadas por combatir la celulitis...!!!
ES BUUUENO SER MUJERRRRR porque...
Nos bajamos primero del Titanic...
Podemos asustar a nuestros jefes hombres con excusas de misteriosos desordenes ginecológicos.
Los taxis se detienen por nosotras.
Tenemos la habilidad de vestirnos nosotras mismas y comprar nuestra propia ropa. Podemos hablarle a la gente del sexo opuesto sin tener que imaginárnoslos desnudos.
Hay veces en las que el chocolate realmente puede resolver nuestros problemas.
Nunca nos arrepentiremos de habernos perforado las orejas. Podemos deducir como es alguien con tan solo mirarle los zapatos- Podemos hacer comentarios sobre cuan tontos son los hombres en su presencia porque no están escuchando de todas maneras.
Mujeres: Ellas sonríen cuando quieren gritar.
Cantan cuando quieren llorar.
Lloran cuando están felices y ríen cuando están nerviosas.
Luchan por lo que quieren.
No toman un 'no' por respuesta cuando creen que hay una mejor solución.
Andan sin zapatos nuevos para que sus hijos puedan tener los suyos
Van al médico con una amiga asustada.
Aman incondicionalmente.
Lloran cuando sus niños sobresalen y animan a sus amigos a que lo hagan.
Se les rompe el corazón cuando muere un amigo.
Sufren con la pérdida de un miembro de la familia, aunque son fuertes cuando creen haber perdido la fuerza.
Saben que un beso y un abrazo pueden curar un corazón herido.
Las mujeres vienen de todos los tamaños, colores y formas. Ellas manejan, vuelan, caminan, corren o escriben por correo electrónico para demostrarte cuánto les importas. El corazón de una mujer es lo que hace al mundo girar.!
Las mujeres hacen más que solo dar a luz: traen alegría y esperanza.
Ellas dan compasión e ideales. Dan apoyo moral a sus familiares y amigos.
Reenvíalo a tus mujeres amigas para recordarles cuán increíbles son...
Alterada? Sí!! Y a mucha honra
Y dice el Martín que dice él:
Un hombre alterado no es un loco. Suponiendo que a los hombres también nos consideren personas. Un tipo alterado es un hombre que está cambiando, por dentro, a pesar de que por fuera sigua siendo el mismo tipo de siempre. Y creo que fue Borges quien dijo que los únicos que nunca cambian son los tontos y los muertos.
Si bien es cierto que la mayoría de las personas "sufren" los cambios, hay tipos que disfrutan con ese sufrimiento, porque el dolor es la mejor señal de que es­tás aprendiendo.
Y si se puede convenir en que la mayoría cambia cuando no soporta más lo que le pasa, hay otros que eligen soportar más, y les siguen pasando las mis­mas cosas, por fuera, aunque por dentro alumbraron una nueva personalidad, que es como traer una nueva vida al mundo. Ya que no las podemos engendrar físicamente, al menos nos queda ese consuelo. Porque hay tipos que eligen soportar más, para que los que están a su lado, soporten menos.
Así, el que hasta ayer volvía a su casa a las tres de la mañana, dando vueltas para escaparse de lo que creía un destino equivocado, empieza a volver a las 9:30, para cenar con los chicos. El que se fumaba un porro, o se pegaba un saque, o se chupaba siete whiskys por noche, ahora lee siete libros por mes. El que maneja una empresa sin consultar con nadie, empieza a conversar con sus hijos para explicarles cómo deben decidir. El que no soporta a la suegra, em­pieza a saludarla y a preguntarle cómo anda, y escucha la respuesta. El que hacía gimnasia para bajar la panza, empieza a comerse un asadito con los amigos de la infancia, para ver en qué nos cambió la vida. Y deja el gimnasio, y el pucho, por las dudas que pase algo.
Y el que tenía una amante, le explica que en la vida hay que hacerse cargo de las decisiones que se toman, aunque sean un error, y aunque se le desgarre el corazón por esa piel y esos ojos que lo hacen vibrar como en la pubertad. Por­que en la vida jugamos distintos roles, y ser esposo puede ser un error corregi­ble, pero no ser padre es un error imperdonable.
En el medio, te van tratando de "pirado", baboso, impotente, fracasado, inma­duro, egoísta y por supuesto, de un insulto que algunos creen elogio: Machista.
Pero no todo es negro: Si bien, estas cosas son recibidas con cierta tristeza por algunos de los que nos rodeaban, como las ex amantes, o los amigos de la noche, o los analistas, porque pierden un paciente, otros no entienden muy bien qué es lo que pasa, pero disfrutan el cambio.
Y no es fácil descubrir que tenés que hacerte cargo. Por mucho tiempo pensa­mos que lo mejor hubiera sido haber tomado otras decisiones, o no haber deci­dido. Hoy, que sabemos que hasta los más poderosos tampoco duermen bien, estamos más contentos con nosotros mismos. Al menos tenemos hijos, no herederos.
Y aceptamos lo que no nos gusta, y no sólo los impuestos o el auto que mane­jamos.
Y lo logramos.
En estos años, habemos tipos que hemos cambiado mucho.
Antes estábamos obsesionados por ganar más plata, cambiar el auto, hacer la casa y conseguir minitas.
Ahora, estamos menos estresados porque conseguimos logros "más sutiles, ingrávidos y gentiles", como decía el Nano, ya no tenemos culpa por los errores del pasado, y nos sienta recómoda la pancita.
ES BUENO SER HOMBRE, y poder cambiar. Porque nos quedamos en el Ti­tanic, para que otros se salven. Podemos hacernos cargo de las tareas de nuestras empleadas, que están "en esos días", o tienen tránsito lento. Viajamos en colectivo, porque los taxis no nos paran. Seguimos usando el mismo traje de hace siete años, aunque no nos prenda muy bien, y no nos compramos ropa.
Podemos escuchar a un amigo contarnos que no se banca a la esposa, y darle el único consejo que se nos ocurre: "dejate de joder...", o mirar a alguien del sexo opuesto, imaginarla desnuda, como corresponde, y no entender cómo puede ser que semejante minón esté tan obsesionada con esa celulitis, que le queda tan bien. Y nada más que eso.
Hay veces en las que un momento de soledad, realmente puede resolver nuestros problemas. A veces, seguimos arrepintiéndonos de habernos puesto aquél anillo, pero ya no tanto, porque algo aprendimos. Podemos deducir qué busca una mina, con tan sólo mirarle los zapatos. Podemos hacer comentarios sobre cuán tontas son las mujeres en su presencia, porque no están escu­chando de todas maneras.
Hombres:
Sonreímos cuando queremos sonreir, gritamos cuando no queremos, cantamos cuando queremos cantar, y lloramos cuando estamos felices, y también cuando estamos tristes, y a veces no se nos ven las lágrimas. Luchamos por lo que queremos, y por lo que creemos que es bueno y justo. Tomamos un "no", como una de las tantas respuestas posibles, y buscamos una mejor solución. Anda­mos con los mismos zapatos de siempre, y vendemos el auto para que nues­tros hijos estudien. Tomamos un café con un amigo asustado. Amamos profun­damente, apasionadamente, a veces calladamente, y siempre aceptamos las condiciones. Soñamos con que nuestros hijos sobresalgan, y lloramos cuando lo logran, y los animamos para que tengan más amigos, y que los ayuden para que ellos también lo logren.
Se nos rompe el corazón cuando se muere un amigo. Algo se rompe dentro nuestro cuando se rompe una familia y cuando no damos más, y lo hemos per­dido todo, aprendemos algo, ponemos primera y arrancamos otra vez. Y sin tomar pastillas.
Sabemos que un beso y un abrazo pueden curar un corazón herido
Los hombres venimos de todos los tamaños, colores y formas. Cocinamos, lim­piamos, planchamos, aunque nunca tan bien como ellas, y escribimos por co­rreo electrónico para demostrar cuánto nos importa alguien.
El corazón de un hombre es lo que hace que el mundo no se detenga. Los hombres hacemos más que traer dinero a la casa, traemos paciencia y espe­ranza. Nos compadecemos de los más débiles, y luchamos por nuestros idea­les. Recibimos apoyo moral de nuestros familiares y amigos, y aprendemos de eso.
Y seguimos adelante, aunque se nos desgarre el corazón por aquella piel y esos ojos que nos hicieron vibrar como en la pubertad.
Alterado? No!! Simplemente cambiando!!!, y aprendiendo...
Y dice el alfio. GRACIAS MARTÍN

01 marzo 2009

LEVANTO MI COPA. SALÚ..!!

¿Qué mano habrá tejido el entramado que nos unió, hermano?
¿Qué viejas manos callosas, cariñosas y baquianas en el antiguo sendero de la ternura (nombro a Adriana, tu madre y la Pila, la mía) habrán manejado el telar para crear esta urdimbre que nos tiene siempre uno al lado del otro.
Esta manera criolla y pedestre de querernos debe tener algún antiguo origen.
En fin. Hoy: un día después del 28 de febrero, día de tu cumpleaños, levanto mi copa agradecida y brindo a tu salud, hermano que me dio la vida. Y hago público este cariño que me eleva y ennoblece. Un abrazo grande de parte de Amancay y Josefina. alfio
Salú.

15 febrero 2009

EPITAFIO

Epitafio: (Del lat. epitaphĭus, y este del gr. ἐπιτάφιος, sepulcral). Inscripción que se pone, o se supone puesta, sobre un sepulcro o en la lápida o lámina colocada junto al enterramiento.
Resulta que, de vez en cuando, uno cae en cuenta que este aire que respira, este cuerpo que padece y sufre y goza y descuida, es solamente un envase retornable, y que, llegada la hora de de entragar los botines y marcharse a las duchas celestiales (o del averno, cualquiera sea el caso), tiene que dejar, al menos un recuerdo, un gesto para ser recordado con una sonrisa y no con una puteada. Uno descubre que no es el único. Miren sino, lo que escribió Rufino Blanco Fombona, poeta venezolano, reporteado por Norberto Galasso para la revista crisis nº 22 de febrero de 1975. Este texo corresponde al libro "Camino de Imperfección", (diario de la vida).

Epitafio
Quisiera, al morir, poder inspirar una pequeña necrológica por el estilo de la siguiente:
Este hombre, como amado de los dioses, murió joven. Amó campos, ríos. fuentes; amó el buen vino, el mármol, el acero el oro; amó las núbiles mujeres y los bellos versos. Despreció a los timoratos, a los presuntuosos. A los mediocres. Odió a los pérfidos, a los hipócritas, a los calumniadores, a los venales, a los eunucos y a los serviles, Se contentó con jamás leer a los fabricantes de literatura tonta. En medio de su injusticias, era justo. Prodigó aplausos a quien creyó que los merecía; admiraba a cuantos reconoció como superiores a él y tuvo en estima a sus pares. Aunque a menudo celebró el triunfo de la garra y el ímpetu del ala, tuvo piedad del infortunio hasta en los tigres. No atacó sino a los fuertes. Tuvo ideales y lucho y se sacrificó por ellos. Llevó el desinterés hasta el ridículo. Sólo una cosa nunca dio: consejos. Ni en su hora más tétrica le faltaron de cerca o de lejos la voz amiga y el corazón de una mujer. No se sabe si fue moral, inmoral o amoral. Pero él se tuvo por moralista a su modo. Puso la verdad y la belleza –su belleza y su verdad– por encima de todo. Gozó y sufrió mucho espiritual y físicamente. Conoció el mundo todo y deseaba que todo el mundo lo conociera a él. Ni emperiatorista ni acrático, pensaba que la tolerancia y la inteligencia deben gobernar los pueblos y que debía ejercerse un máximo de justicia social, sin privilegios de clases ni de personas. Cuanto al arte, creyó siempre que se podía y se debía ser original, sin olvidarse del nihil novum sub sole. Si vivire fue ilógico, su pensar fue contradictorio. Lo único perenne que tuvo parece ser la sinceridad, ya en la emoción ya en el juicio. Jamás la mentira mancilló sus labios ni su pluma. No le temió nunca a la verdad, ni a las consecuencias que acarrea. Por eso afrontó puñales homicidas, por eso sufrió cárceles largas y larguísimos destierros. Predicó la libertad con el ejemplo: fue libre. Era un alma del siglo XVI y un hombre del siglo XX.
Descanse en paz, por la primera vez. La tierra, que amó, le sea propicia.
Algunos epitafios escritos por quienes ocupan la tumba que adornan:
"Si queréis los mayores elogios, moríos." Epitafio de: Enrique Jardiel Poncela
"Ya decía yo que ese médico no valía mucho." Epitafio de: Miguel Mihura, escritor de comedias.
"Voy y Vuelvo"Epitafio de: Nicanor parra, antipoeta chileno-

14 febrero 2009

SOBRE LOS PÁJAROS

Después de haber descubierto ese sitio donde se puede ser generoso y disfrutar de la generosidad de los otros llamado Goear, aprendí a subir la música que yo tengo y que voy a utilizar para ilustrar sonoramente mis-estos aportes. (No. No nos hemos divorciado con el Walter... démosle tiempo, ya va a reaparecer). En este caso se trata de volver sobre Antonio Esteban Agüero y un poema que no es muy conocido y habla de LOS PÁJAROS.

LOS PÁJAROS
haced silencio ahora, un silencio profundo,
detened los relojes,
las máquinas, los trenes,
para que pueda abrirse mi canto sobre el mundo,
mi canto de los pájaros, esos mágicos seres.

apagad los clarines que inician las batallas,
acallad los tambores que acompañan la muerte,
dejad que me comprendan obreros y soldados,
y los niños que yacen bajo grises paredes.

para vosotros digo mi canto de los pájaros,
para vosotros taño mi vieja flauta verde
la que una vez, de niño, corté en la cañavera
junto al sereno río con álamos y peces.

de los azules dedos de Dios, en la mañana,
han salido las cosas, han brotado los seres,
pero del alma misma de Dios, de su mirada,
han nacido las formas de las aves silvestres.

bajo la suave y tibia penumbra de esta noche
yo los nombro, y la luz nace en mí, de repente,
porque las aves traen el cielo hasta nosotros
más que todos los rezos rezados por las gentes.

ningún milagro tuvo más noble jerarquía,
ningún milagro, nada, más hermoso que éste:
que la pesada carne que todos compartimos
sea flor en el aire, sea música y vuele.

Beethoven niño iba paseando entre los bosques
que el ancho rhin duplica en su espejo luciente,
y negros ruiseñores bajaban por su oído
hasta el lugar del pecho donde mana la fuente.

Chopin, con suaves dedos gastados por las teclas,
-sobre la sien un bucle de pelo adolescente-,
recogía los trinos brillantes de la alondra
para que luego el piano cantase dulcemente.

¿de dónde Bach obtuvo la fuerza de su canto?
¿dónde aprendió su clave de arpegios celestes?
¿qué río de pinzones, qué vientos de estorninos
hasta las puras manos bajaban de su frente?

Francisco, el poverello de Asís, los comprendía,
las tórtolas recuerdan su olor a hierba leve,
sus grandes, claros ojos de lágrima y gacela,
y su voz como sombra de encina y roble verdes.

Guillermo Enrique Hhudson vivió en su compañía
en pampas argentinas o en boscajes ingleses,
buscando el paraíso guardado por el ángel
lo encontró en las criaturas aladas y silvestres.

vosotros hombres fríos, de labios apretados,
odiados, por el fuego, por el mar, por la nieve,
destructores de vida, cavadores de fosas,
sabed que en toda fronda habrá pájaros siempre.

Y disfruten de un juglar llamado Mario Díaz y este tema maravilloso que habla de los depredadores de dos patas que asolan el monte y saquean sus trinos para luego vender ese maravilloso canto, enjaulado. Por una pocas monedas.


12 febrero 2009

"Yo no quiero morir..."

Yo no quiero morir. Es imposible
que yo pueda morir mientras la vida
siga viva en jilgueros y caballos.

Si yo siento la vida deliciosa
como un río de abejas -en febrero,
locas de sol- por las profundas venas.

Si yo tengo mi voz en la garganta,
mi voz plena de nombre, abarcando
el contorno y la esencia de las cosas.

o no quiero morir. Si el mundo nace
cada día de mí como los niños
de la entraña madura de sus madres

Si los árboles nacen de mis ojos;
y las suaves mujeres de mis manos;
y la música nace de mi oído.

Yo no puedo morir, que soy la Vida
porque tengo en los pulsos prisionera
una ardiente pareja de palomas.

¿Y he de morir? ¿He de dejar la tierra
con sus prados y bosques musicales,
con sus aguas, con su fuego rojo?

¿Con sus ciudades y sus barcos negros,
con sus caminos y sus trenes largos,
con la muchacha de color de arena
cuyo cuerpo es un cálido racimo?


De “EL POEMA DEL PREGÓN” de ANTONIO ESTEBAN AGÜERO

Antonio Esteban Agüero nació en Piedra Blanca (San Luis) el 7 de Febrero de 1917 y murió en San Luis el 18 de Junio de 1970.
Su vocación literaria se manifestó a temprana edad, los pri­meros relatos y poemas datan desde sus quince años. Poeta y prosista obtuvo distinciones por varios de sus trabajos: "Re­trato de un dama" obtuvo el 1º Premio de Poesía y Medalla de Oro, 1947, de la Dirección General de Cultura de Córdoba, "Las cantatas del árbol" y "Romancero de niños" fueron galar­donados con el 1º Premio Nacional de Literatura Regional, máxima distinción a que puede aspirar un escritor residente en el interior del país.
En 1960 el diario "Clarín" de Buenos Aires otorgó al poeta, por voto unánime de los tres jurados que fueron: Jorge Luis Borges, Enrique Larreta y Fermín Gutiérrez, el premio del Sesquicentenario de la Revolución de Mayo a su poema "Un hombre dice a su pequeño país".
Un tipo de este tamaño no puede morir. De hecho, sigue vivo cada vez que alguien como mercedes sosa canta esa maravilla que musicalizó Peteco Carabajal: "Digo La Mazamorra".


Como colofón, y para no aburrir, les dejo otra de sus maravillas. Se trata de su poema "Digo El Llamado", poema que cada vez que visito el monumento al Pueblo Puntano, me emociono hasta las lágrimas (no es un eufemismo: me emociono hasta las lágrimas) con este capítulo de la historia contado con ese ritmo y esa sencilla pasión por exaltar la generosidad de un pueblo que no tenía casi nada y que dió todo ante el pedido del General San Martín. Disfrútenlo:

Digo el llamado

Y después en caballos redomones
que urticaba la prisa de la espuela
galoparon los Chasquis por las calles
de la ciudad donde Dupuy gobierna,
conduciendo papeles que decían:
“el General de San Martín espera
que acudan los puntanos al llamado
de Libertad que les envía América”
Y firmaba Dupuy, sencillamente,
con la mano civil y la modestia
de quien era varón republicano
hasta el cogollo de la misma médula.

Y los Chasquis partieron con el poncho
como un ala flotando en la carrera,
hacia todos los rumbos provinciales
por los caminos de herradura o huella,
ignorantes del sol y la fatiga,
sin pensar en la noche o la tormenta;
llegaron hasta el Morro por la tarde,
y por el alba cabalgaron Renca,
y entregaron mensajes en La Toma,
en La Carolina y La Estanzuela,
en las villas de Merlo y Piedra Blanca,
en el Paso del Rey y Cortaderas,
en Nogolí también y San Francisco,
en cada población y en cada aldea,
y en estancias y oscuras pulperías
y en velorios, bautizos y cuadreras,
dondequiera paisanos se juntaran
en solidaria diversión o pena.

Y los hombres dejaban el arado,
o soltaban azada o podaderas,
o la hoz que segaba los trigales,
o la taba o el truco en la taberna,
o el amor de las jóvenes esposas,
o la estancia feudal, o la tapera,
o el cedazo que el oro recogía
cuando lavaban misteriosa arena,
o el telar, o los muros comenzados,
o el rodeo de toros en la yerra,
para ir hasta el valle de las Chacras
donde oficiales anotaban levas.
Y hasta había mujeres que llegaban,
con vestidos de pardas estameñas,
al umbral de Dupuy para decirle:
“Vuesa Merced conoce mi pobreza,
yo no tengo rebaños ni vacadas,
ni un anillo de bodas, ni siquiera
una mula de silla, pero tengo
este muchacho cuya barba empieza”

De Mendoza llegaban los mensajes
breves, de dura y militar urgencia:
“Necesito las mulas prometidas;
necesito mil yardas de bayeta;
necesito caballos; más caballos;
necesito los ponchos y las suelas;
necesito cebollas y limones
para la puna de la Cordillera;
necesito las joyas de las damas;
necesito más carros y carretas;
necesito campanas para el bronce
de los clarines; necesito vendas;
necesito el sudor y la fatiga;
necesito hasta el hierro de las rejas
que clausuran canceles y ventanas
para el acero de las bayonetas;
necesito los cuernos para chifles;
necesito maromas y cadenas
para alzar los cañones en los pasos
donde la nieve es una flor eterna;
necesito las lágrimas y el hambre
para más gloria de la Madre América...”

Y San Luis obediente respondía
ahorrando en la sed y la miseria;
río oscuro de hombres que subía;
oscuro río, humanidad morena
que empujaban profundas intuiciones
hacia quién sabe qué remota meta,
entretanto el galope levantaba
remolinos y nubes polvorientas
sobre el anca del último caballo
y el crujido final de las carretas.

Y quedaron chiquillos y mujeres,
sólo mujeres con las caras serias
y las manos sin hombres, esperando...
en San Luis del Venado y de las Sierras.

Antonio Esteban Agüero

Les prometo, en otro aporte a este blog, contarles lo que pensaba este Poeta con respecto al mate. Por ahora les digo buenas noches. Muchas gracias por la atención dispensaba. (a.,)

09 febrero 2009

APUNTES ACERCA DE UNA MALA MUJER

En la edad de oro del potrero, cuando lograban su apogeo la gambeta, el caño y la pared, también existían enemigos del fútbol atorrante que preocupaban a los iracundos habitantes del baldío. El más peligroso de todos era ese oscuro per­sonaje de la geopolítica barrial: la vieja de al lado.
La mujer tenía rasgos característicos que la diferenciaban de las demás viejas del barrio. Por ejemplo, su enagua superaba siempre dos centímetros la línea de la pollera. La escoba -con la que se empeñaba en barrer tres veces por día la ve­reda- estaba completamente gastada. Pero diferencia esencial era su vecindad con la canchita.
La casa estaba separada del campo de juego por una pared protegida por filosos culos de botellas, que impedían el acceso directo. Un patio lleno de macetas de frágil resistencia a los pelotazos, un limonero y la infaltable planta de nísperos formaban parte de la escenografía que definía el fondo de la casa, lugar desen­cadenante de la tragedia.
El picado se desarrollaba sin sobresaltos hasta que alguien, embebido en el fra­gor del entrevero, "colgaba" la pelota del otro lado de la tapia. El suceso provo­caba la inmediata descalificación moral de la madre del shoteador por parte de sus compañeros, expresada con una admirable capacidad de síntesis. El respon­sable del remate, según cierta regla de honor de origen desconocido, era el en­cargado de recuperar el balón. Su tarea consistía en detenerse frente a la puerta de entrada de la vivienda y golpear repetidamente las manos. El llamado era acompañado, generalmente, por el ladrido histérico del "Buqui", pertinaz can­cerbero de la morada. Luego de varios minutos, una voz pastosa y ronca, que denunciaba un reposo recién abortado, interrumpía los aplausos. "Mocoso de porquería !" ¿No saben que es la hora de la siesta? La pelota no la ven nunca más!" Un portazo daba por concluido el "diálogo" y, consecuentemente, el par­tido.
Ya nada podía consolar al Gordo, incondicional dueño del balón, quien recla­maba entre sollozos: "Pierde garpa, viejo, pierde garpa".
El destino final de la redonda soportaba las especulaciones más audaces. La tesis de mayor consenso entre los damnificados sostenía que la pelota era reba­nada en gajos por la arpía con la cuchilla de cortar la carne. Los más atrevidos aseguraban que la ceremonia sólo se llevaba a cabo las noches de luna llena.
El hecho tuvo consecuencias que influyeron de manera ostensible en el desa­rrollo de los picados posteriores. El temor ante la pérdida del elemento de juego obligaba a los participantes a esmerarse en los pases certeros, jugados con pe­lota a ras del suelo. La práctica consecuente de esta conducta puede verse refle­jada hoy en los estadios del fútbol profesional. Allí es fácil distinguir quienes surgieron de un, digamos, potrero-vieja-de-al-lado, de quienes no responden a ese origen y todavía siguen pegándole de punta y para arriba.
Las repercusiones del conflicto no fueron solo deportivas. El rencor acumulado por los atorrantes contra la figura de la mujer hacía eclosión en la época navi­deña, cuando los punitivos rompeportones destrozaban la corona de muérdago que colgaba de la puerta de su casa. La utilización de la canilla del jardín para inflar bombitas de agua o el saqueo sistemático de nísperos eran otras formas de ejecutar la venganza.
Pero había una circunstancia inexplicable, la repetición del fenómeno en todos los barrios de las grandes ciudades del país. Eduardo Rafaelli, brillante insai izquierdo del Club Atlético Liniers e hijo dilecto de los potreros de la zona, re­cuerda su experiencia. "Nosotros desechábamos terrenos de inmejorables con­diciones para la instalación de una canchita porque no lindaban con la casa de una mujer entrada en años, de gesto adusto y reconocido mal carácter." La sim­biosis era evidente, diría un psicólogo apresurado.
Lo único seguro es que estas historias han dejado de suceder. El potrero ha muerto de progreso y su fantasma mistongo languidece en los picados domin­gueros de los parques públicos. En esos lugares, todavía puede verse a algunos nostálgicos que, por las dudas, la siguen jugando pegada al piso.

Sergio Ranieri

08 febrero 2009

Cuadernos de todo y nada

"Todo se ha escrito, todo se ha dicho, todo se ha hecho, oyó Dios que le decían y aun no había creado el mundo, todavía no había nada.
También eso ya me lo han dicho, repuso quizá desde la vieja hendida Nada. Y comenzó. Una frase de música del pueblo me cantó una rumana y luego la he hallado diez veces en distintas obras y autores de los últimos cuatrocientos años. Es indudable que las cosas no comienzan cuando se las inventa. O el mundo fue inventado antiguo. "


"Puedo asegurar que estoy tan triste mientras escribo encerrado en habitación inadornada, sin nada que llame o acompañe, en esta pieza que nada me dice, solitario a estas horas del anteamanecer en que todo habla de extenuación, de la vida en muerte, del deseo cansado de no volver a la vida, de haber concluido, que siento miedo de saber que tengo un nombre, que soy humano y existo. ¡Qué soledad terrible! ¿Qué estas, Vida, tejiendo conmigo que tanto seguí y te comprendo? Y tú, dulce criatura, pecho de todo amor, dolorida juventud, flor sin sol, niña que ya dejó sin sueños la vida, incomprendida por los malos, inadvertida por los buenos atareados, ¡qué soledad valerosa la tuya, Adriana, que no tienes siquiera la pluma para envanecerte de quejas como yo en mis cobardías! ¡Adónde voy cayendo! Mis páginas serán siempre veraces. No habrá una de ellas sin el nombre de Adriana, que es mi verdad, sin mi sufrir, que no puedo vencer, sin las fábulas forzadas con que procuro defenderme, hacerme querer de la Vida optimista. En esta desierta hora y abandono, tan débil, tan vencido soy que estoy escondiéndome de todo, porque cualquier cosa que me tocara, una mariposa que volara, un papel que cayera al suelo me derrotaría; si sólo viera escrito mi nombre en algún sobre... ¡Si es sólo el temor de caer más, solo aquí, que me contiene! ¿Hubiera imaginado yo ir cayendo así desde hace tres años, a esta tenuidad, a esta nada de cosa humana tan exangüe que el saber que tengo un nombre entre los sueños y los vivires es un miedo para mí...? (...)
__**__
Al leer ese texto se me dispararon una infinidad de sentimientos y se me despertaron un montón de pájaros en la memoria, solamente conocidos por el Walter y yo, y eso nos hace cómplices y responsables (entre otra cosas) de La Sopapillla. Me dije: ¿podré compartir sin mancillar ese recuerdo, y sin develar demasiado el misterio para que siga siendo tal? Después de todo ¿qué son los recuerdos?¿Son nuestros verdaderamente? ¿Los recordamos tal y como fueron? ¿O los adornamos, acomodamos, poniéndoles y sacándoles cosas para poder recrearlos como nos hubiese gustado que fueran? Entonces recurrí a esa –cuándo no –Biblia contemporánea llamada Joan Manuel Serrat. Encontré esto:

Sigo leyendo a Macedonio en la página mencionada, y llego a esto:
Desde el silencio a que retorno, desde las sombras de las cuales no salí nunca para ti, yo que no habité, no habitaré nunca tu camino, que no conoceré nunca el son de tu voz, tus risas, ni miraré tus lágrimas, que no seré nunca una imagen en tu retina ni un pensamiento en tu alma, pero que te he conocido en un instante tan plenamente como si fueras una obra de mi deseo, yo que no creo en la muerte de los que aman, ni en la vida de los que no aman, te digo lo que no me oirás nunca, y que ya sabes: que es imposible que no seas feliz. Y, sin embargo, nos encontraremos; no aquí en la fantasmagoría terrena, sino en la eternidad del yo indestructible, continuo y consciente de su eterna continuidad pasada y a transcurrir. ¡Nos hemos conocido y amado, cuántas veces! "
Nuevamente Serrat para dar sólo una pista en lo referente a la razón de estas líneas y a uno de los fundamentos de esta hermandad que supera largamente ya las tres décadas.



Gracias: sigamos con el disparador de este aporte, Macedonio Fernández, que fue un humorista sutil que comenzó a replantearse cuestiones cruciales sobre la naturaleza del lenguaje, la escritura, el conocimiento, la representación. Planteó de modo anticipatorio la cuestión de los géneros y los conceptos de obra abierta e intertextualidad. Propuso la construcción de un universo novelístico complejo aunque terminó legando una deliberada e insólita operación de escamoteo de esa posibilidad.
La constante interpelación de los textos de Macedonio provoca la existencia de un lector activo y liberado de las tensiones culturales del autor y del narrador omnisciente. Intentó con el Museo de la novela de la Eterna construir una obra en la que “el lector será por fin leído”.
Y todo por que me asaltó de pronto la inquietud de saber quien había muerto o nacido un 10 de febrero, fecha en que publico este aporte, y descubrí que era nada menos este escritor que falleció el 10 de febrero de 1952 y que se constituyó como un referente del modernismo y de la vanguardia en su época.


no me lleves a sombras de la muerte
adonde se hará sombra mi vida,
donde sólo se vive el haber sido.
no quiero el vivir del recuerdo.
dame otros días como éstos de la vida.
oh no tan pronto hagas
de mí un ausente
y el ausente de mí.
¡que no te lleves mi hoy!
quisiera estarme todavía en mí.

hay un morir si de unos ojos
se voltea la mirada de amor
y queda sólo el mirar del vivir.
es el mirar de sombras de la muerte.
no es muerte la libadora de mejillas,
esto es muerte. olvido en ojos mirantes.

Hay Un Morir (Macedonio Fernández)

30 enero 2009

El OFICIO MÁS VIEJO DEL MUNDO


Canonicemos a las putas. Santoral del sábado: Bety, Lola, Margot, vírgenes perpetuas, reconstruidas, mártires provisorias llena de gracia, manantiales de generosidad.
Das el placer, oh puta redentora del mundo, y nada pides a cambio sino unas monedas miserables. No exiges ser amada, respetada, atendida, ni imitas a las esposas con los lloriqueos, las reconvenciones y los celos. No obligas a nadie a la despedida ni a la reconciliación; no chupas la sangre ni el tiempo; eres limpia de culpa; recibes en tu seno a los pecadores, escuchas las palabras y los sueños, sonríes y besas. Eres paciente, experta, atribulada, sabia, sin rencor.
No engañas a nadie, eres honesta, íntegra, perfecta; anticipas tu precio, te enseñas; no discriminas a los viejos, a los criminales, a los tontos, a los de otro color; soportas las agresiones del orgullo, las asechanzas de los enfermos; alivias a los impotentes, estimulas a los tímidos, complaces a los hartos, encuentras la fórmula de los desencantados. Eres la confidente del borracho, el refugio del perseguido, el lecho del que no tiene reposo.
Has educado tu boca y tus manos, tus músculos y tu piel, tus vísceras y tu alma. sabes vestirte y desvestirte, acostarte, moverte. Eres precisa en el ritmo, exacta en el gemido, dócil a las maneras del amor.
Eres la libertad y el equilibrio; no sujetas ni detienes a nadie; no sometes a los recuerdos de la espera. Eres pura presencia, fluidez, perpetuidad.
En el lugar en que oficias a la verdad y a la belleza de la vida, ya sea el burdel elegante, la casa discreta o el camastro de la pobreza, eres lo mismo que una lámpara y un vaso de agua y un pan.
Oh puta amiga, amante, amada, recodo de este día de siempre, te reconozco, te canonizo a un lado de los hipócritas y los perversos, te doy todo mi dinero, te corono con hojas de hierba y me dispongo a aprender de ti todo el tiempo.

"Canonicemos a las putas" Jaime Sabines


Asumo el riesgo de hacer con este aporte una cuestión de señoras ofuscadas y ofendidas, pero... chicas, no maten al cartero. Es sólo un modo de mostrar una realidad cotidiana. Fueron muchísimos los poetas y cantantes que elevaron loas a las "mariposas de la noche". Aquí les dejo dos canciones más, una conocida: la de Sabina, pero la versión que más me gusta, la que canta con Pablo Milanés- .Disfruten.

Y la otra canción está a cargo de Frank Delgado, un trovador cubano: "Embajadora del sexo" refiere a lo que las señoras de lengua gorda y los señores hipócritas llaman "las jineteras".

(a.,) Lo inicializo para asumir correspondientemente la responsabilidad. No culpen al Walter, e, insisto: No maten al cartero

29 enero 2009

Yo vengo de todas partes
y hacia todas partes voy.
Arte soy entre las artes,
y en los montes, monte soy.

Patriota y escritor cubano, José Martí, apóstol de la independencia de Cuba, última colonia española en América.
El hecho de haber muerto en la batalla lo transformó en el mártir de las aspira­ciones cubanas a la independencia.
Nació en el seno de una modesta familia española en la Habana, el 28 de enero de 1853, donde recibió su educación primaria.
A los 16 año tomó parte en la guerra de los Diez Años, por lo que fue conde­nado a seis años de prisión y obligado a realizar trabajos forzados en las cante­ras de La Habana. Con la salud quebrantada, fue indultado y confinado en la isla de Pinos.
Deportado a España en 1871, publicó El Presidio Político en Cuba, el primero de muchos folletos que abogaban por la independencia cubana de España y La República Española ante la Revolución Cubana

¿Qué es vivir si no caerse
para levantarse luego
y saber reconocerse
en lo bastardo del fuego?

Guantanamera, / guajira guantanamera.

Autor de numerosas poesías que fueran llevadas a la canción por músicos de la talla de Pablo Milanés, Silvio Rodríguez, Amaury Pérez, Sara González, etc. O que han servido de inspiración parea otras creaciones, vaya como ejemplo la cita que Silvio hace de un verso de Martí en su canción “Solo el Amor”:

¿Que como crin hirsuta de espantado
caballo que en los troncos secos mira
garras y dientes de tremendo lobo,
mi destrozado verso se levanta...?
Sí; ¡pero se levanta! —a la manera
como cuando el puñal se hunde en el cuello
de la res, sube al cielo hilo de sangre:
Sólo el amor engendra melodías
.



Yo vengo de todas partes
y hacia todas partes voy.
Arte soy entre las artes,
y en los montes, monte soy.

Guantanamera,
guajira guantanamera.

Tiene el leopardo un abrigo
en su monte seco y pardo:
yo tengo más que el leopardo
porque tengo un amigo.

Duerme en mi cama de roca
mi sueño dulce y profundo,
roza una vega mi boca
y crece en mi cuerpo el mundo.

Mi verso es como un puñal
que por el puño echa flor.
Mi verso es un surtidor
que da un agua de coral.

Si ves un monte de espuma
es mi verso lo que ves.
Mi verso es un monte y es
un abanico de pluma.

Yo soy un hombre sincero
de donde crece la palma
y antes de morirme quiero
echar mis versos del alma.


Esta es una de la tantas versiones de su canción más conocida: Guantanamera. No voy a subir ninguna, mejor daré paso a las cosas que no son tanconocidas. Por ejemplo:
Si ves en el monte espuma
Si ves un monte de espumas,
es mi verso lo que ves:
mi verso es un monte, y es
un abanico de plumas.

Mi verso al valiente agrada:
mi verso, breve y sincero,
es del vigor del acero
con que se funde la espada.

Duermo en mi cama de roca
mi sueño dulce y profundo:
roza una abeja mi boca
y crece en mi cuerpo el mundo.

Si ves un monte de espumas,
es mi verso lo que ves:
mi verso es un monte, y es
un abanico de plumas.


Bueno... la seguimos más tarde. Disfruten. (alfio)

16 enero 2009

GUITARRA DE LUTO

A los pocos minutos del martes 17 de enero de 1989 un lacónico parte médico informaba que Alfredo Zitarrosa, el Flaco se quedó dormido para siempre. Tomando las palabras de Carlos Di Fulvio “se nos quedó indiferente”.(La canción se llama “Evocación del Susqueño” y si bien es cierto que no se refería a Alfredo Zitarrosa, algunas estrofas le cuadran. alfio.,)
Daniel Viglieti, en pleno golpe emocional al enterarse del fallecimiento de Alfredo, escribió una sentida nota a la que tituló “Guitarra Roja”. Un recuerdo justo, que no lo “endiosa”: Viglieti tenía claro que, al costado “anarco” de Zitarrosa, esa actitud no le hubiese gustado. (Estas palabras y la cita de la nota de Daniel Viglieti han sido extractadas del libro de Guillermo Pellegrino “Cantares Del Alma” Biografía de Alfredo Zitarrosa. Editorial Planeta – 1999)
De modo que mi vida es nada más que la muestra actual y provisoria de un individuo que nace, crece, tal vez culmina un día, o al menos siempre quien sabe en qué grado de desarrollo, finalmente se muere. Yo soy un tipo con vocación de futuro, estoy a favor del futuro, estoy a favor de la vida, y en particular me considero muy responsable de haber hecho de mi vida todo aquello que significa proyectarse, creo que cualquiera que sea el grado de desarrollo que yo he alcanzado, por lo menos algo de mí va a quedar, y con eso, aunque no me conformo, me siento bastante justificado como para seguir viviendo el tiempo que me queda. Pienso que me queda poco. Al menos de cantor, me queda poco”.
"Eso me dijo hace diecinueve años Alfredo Zitarrosa, resistiéndose a imaginar todo lo que seguiría creando y creyendo, cantando y construyendo en este Uruguay nuestro, tan suyo. La muerte ha llegado temprana, de todos modos y nos arrebata en plena madurez a un cantor insustituible. Me dieron la mala noticia en Alemania, en medio de un trabajo para una versión radial de “Memoria del Fuego”, de nuestro común amigo Eduardo Galeano, en cuya casa ambos cantamos para el compañero Tomás Borge. Fue mi último encuentro con Afredo.
Desde el 17 de enero la ausencia de este inolvidable compañero de camino de más de dos décadas, es como una difícil canción de silencio, y a mi mano le cuesta escribir lo que siento adentro. No tuvimos una relación fácil, es cierto. Pero las diferencias de concepción estética y política nunca nos dividieron ni nos enfrentaron. Quizás él también vivió la curiosa sensación de un dúo imaginario en el que, sin haber nosotros cantado nunca a dos voces, íbamos sumando canciones e ideas sin saberlo, como en comunión de cantos
."
Este es un recuerdo de unos de los tipos más íntegros y coherentes que yo haya tenido noticia. Déjenme compartir un poco de su música; de su extensa obra. Se llama “Guitarra Negra” y probablemente arrime un poco más de comprensión respecto al título de la nota de Vigileti y al título de este aporte: Guitarra de Luto. (alfio.,)

Otro si digo: aquellos que me conocen recordarán que durante todo el tiempo que hice en diferentes radios mi programa Amalgama, la cortina era una obra de don Alfredo: Truco No.